Horarios
08:00 h
Duración: 1h 30min
Tarifas
- Adulto39,00€
- Junior (12-17 años)19,50€
- Niño (menor de 12 años)Gratuito
¿Quieres visitar la Casa Milà antes que nadie? ¿Te gustaría pasear solo por la azotea de los guerreros de La Pedrera? Ahora puedes hacerlo con la visita guiada en inglés "La Pedrera Sunrise".
La Pedrera se despierta cada día y se prepara para recibir a miles de personas que quieren descubrir los secretos de este edificio único de Gaudí.
A primera hora de la mañana, mientras se hacen los preparativos para abrir la casa al público, se despierta la naturaleza que se esconde en cada espacio: flores, árboles, animales marinos... La Pedrera es una obra maestra de la naturaleza, que se despierta con los primeros rayos de la luz del sol.
Con esta entrada te proponemos hacer un recorrido por La Pedrera antes de que se abra al público. Además de conocer los espacios de la casa, descubrirás que inspiró Antoni Gaudí a crear esta joya arquitectónica.
"La Pedrera Sunrise" es una visita guiada en inglés que incluye: La azotea de los guerreros, el ático de la ballena con la exposición Gaudí (situado en el desván, el piso de los vecinos y el patio de las flores y el patio de las mariposas, así como algunos espacios que no se pueden ver en la visita general.
No te pierdas este recorrido único y sé el primero en visitar La Pedrera.
*La visita podría no coincidir con el amanecer
¿Qué verás?
La azotea de los guerreros
Una obra única, inclasificable
Este espacio único, cargado de fuerza artística y simbólica, fue diseñado para cumplir un papel funcional, totalmente alejado de la arquitectura de su tiempo. El sorprendente conjunto de esculturas arquitectónicas que hay en la azotea de los guerreros se despiertan con los primeros rayos de luz. Algunas están cubiertas con trencadís (fragmentos de cerámica), mientras que los elementos que son menos visibles desde la calle sólo están recortados y pintados. Por la espectacularidad de la fachada y por la originalidad de la azotea, La Pedrera se considera uno de los edificios más destacados del siglo XX.
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La fachada
Una escultura arquitectónica
La Pedrera debe su nombre a la espectacular fachada de piedra, formada por tres fachadas unidas; la del paseo de Gracia, el chaflán y la calle Provenza. Con 30 metros de altura, los 84 metros de extensión se distribuyen de manera desigual. La fachada más larga está situada en la calle Provenza, mientras que las otras dos ocupan 20 metros cada una. A partir de innumerables elementos reciclados y con una gran libertad artística, Gaudí desarrolló las barandillas de hierro forjado en las fachadas de Casa Milà como si fueran piezas de escultura abstracta.
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El patio de las flores y el patio de las mariposas
La naturaleza viva en el corazón del edificio
Antoni Gaudí innovó uniendo los pequeños patios de ventilación en dos grandes espacios, de una forma espectacularmente orgánica, que organizan la planta y optimizan la luz y la ventilación. Las paredes de los patios de la Casa Milà son un verdadero espectáculo de formas, luz y color, que muestran que la naturaleza aún vive y está presente en el corazón del edificio. El color se presta por los murales, principalmente con motivos florales, que también están presentes en los techos y las paredes laterales de los dos vestíbulos.
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El ático de la ballena
Descubrir Gaudí en un espacio mágico
Entrar en el desván de la Casa Milà es como entrar dentro de una gran ballena, que respira y nos acoge. Allí podremos ver la exposición Gaudí, un centro de interpretación que presenta al visitante la vida i obra de Gaudí a través de maquetas y planos, objetos y diseños, fotografías y vídeos. La exposición se divide en siete áreas, una de las cuales se entrega íntegramente en La Pedrera. Con una visita a la exposición Gaudí conocerás también el papel que tuvo la naturaleza para inspirar al famoso arquitecto.
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El piso de los vecinos
La vida de hace 100 años
Situado en la cuarta planta del edificio, el piso de La Pedrera ocupa dos casas. En la primera, un audiovisual presenta una panorámica de un periodo clave en la historia de Barcelona, entre 1909 y 1929. La segunda residencia te permitirá viajar en el tiempo y ver cómo era un piso de una familia burguesa del primer tercio del siglo XX, con los elementos originales de Gaudí, como los mangos de las puertas, las molduras y las rejas. El uso original de cada una de las habitaciones se ha mantenido y decorado con muebles de época, obras de arte, adornos, telas y accesorios que sitúan el apartamento en el contexto de su tiempo y muestran cómo se vivía.
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Sala Gaudí
Antiguas cocheras
Con esta visita podrás descubrir este espacio, que no forma parte de la visita general del edificio, y que Gaudí proyectó como zona de servicio que alojaba los garajes, los almacenes y la sala de máquinas de la calefacción. Las antiguas cocheras forman actualmente el Auditorio (abierto en 1994 como tal) y la Sala Gaudí, dos espacios accesibles por rampa, proyectados para el acceso de vehículos. 90 columnas de hierro, ladrillo y piedra mantienen el edificio desde el zócalo.
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